Sigo aquí
Yo sigo aquí Arrastrando un fantasma, Que ni me habla, ni me toca, Cómo si su solo existir sabe que es suficiente para martirizar mi existencia. Lo alimento con mi incapacidad de renunciar, De reproducir recuerdos al querer domir, Al simular conversaciones que no serán, Al transitar entre mis deseos y su desprecio. Yo sigo aquí Entre huellas indebles clavadas En un alma hueca, rota y desgastada... Entre alcohol y unas hojas en blanco, Que por más que escriba no se llenan. No se llenan... Y el dolor no se va... Sus besos no se van... Tu no te vas... Yo me he querido ir... Pero después ¿quien te querrá?