Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2022

Sigo aquí

Yo sigo aquí Arrastrando un fantasma, Que ni me habla, ni me toca,  Cómo si su solo existir sabe que es suficiente para martirizar mi existencia. Lo alimento con mi incapacidad de renunciar, De reproducir recuerdos al querer domir, Al simular conversaciones que no serán, Al transitar entre mis deseos y su desprecio. Yo sigo aquí Entre huellas indebles clavadas En un alma hueca, rota y desgastada... Entre alcohol y unas hojas en blanco, Que por más que escriba no se llenan. No se llenan... Y el dolor no se va... Sus besos no se van... Tu no te vas... Yo me he querido ir... Pero después ¿quien te querrá?

Déjame sentir

Déjame sentir esto... Este sabor amargo de la falta de su calor, de su risa, de su voz,. Déjame sentir como se me va la vida cada vez que respiro y no se me llena con su olor mis pulmones. Cómo en mi memoria va desapareciendo su figura y tengo que recurrir a aquellas fotos... sobre todo esa foto de nuestra primera cita, a las tres de la mañana, donde nos vemos de frente, donde tú sonrisa era todo lo que necesitaba en esos días y tus ojos eran el guía que necesitaba sujetar en esta vida tan gris, tan fatalista, tan sin sentido. Déjame sentir todo esto. Que es la esencia de cada ser humano, las de muy pocos, amar y ser correspondido. Las de muchos de nosotros... amar y llenarnos de lamentos por no tener al lado la persona amada. Déjame sentir como el tiempo se agota en mi piel, mientras dibuja arrugas en mi rostro, en mi alma, en mi voz. Cómo mi castillo de sueños construidos entre los muchos abrazos y los muchos besos se va haciendo polvo, mientras voy fusionandome con mis penas y melan