Hay unos labios

Hay unos labios agrietados
que saben a qué saben las lágrimas,
que ya besaron tantos sapos
que solo susurra amargas palabras.

Que convierte en poesía
cada cosa que dice,
que cuando el viento los toca
se visualizan sus matices.

Hay unos labios de carmín
que roba miradas malintencionadas,
que están marcados por huellas
que borraron esperanzas.

Que recorren espaldas
cuellos, pechos y labios,
pero que en noches de tormentas
solo a su almohada sigue besando.

Hay unos labios tan viejos
que se renuevan en cada beso,
en cada verso, en cada cuerpo,
en cada intento.... en cada intento.

A.J de la Cruz

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